Su abuelito siempre la puso cachonda
Un abuelo siempre es un hombre especial para cualquier jovencita, y ella siempre le había tenido un cariño muy por encima de lo que se podría considerar normal. Tal era así que llegó a confundir lo que era el cariño familiar por el atractivo y morbo sexual. O más bien en otras palabras, ella deseaba tener sexo con su abuelo ya que según ella era el hombre de su vida. Tenía mucha confianza con él, a veces le daba masajes en los hombros y pasaban bastante tiempo juntos. Pero ese día era el elegido por ella para hacer algo que deseaba desde hacía demasiado tiempo. Por lo que en cuanto su abuelo volvió a su habitación se la encontró en la cama y desnuda, una clara insinuación de lo que deseaba.
Se acercó a aquella bella jovencita rubia y ambos comenzaron a besarse. Se tiraron en la cama y la putita le comió la polla a su abuelito. Debido a su edad le costó ponerse duro, pero su nieta era incentivo más que suficiente para lograr una buena erección. Finalmente la penetró con su pequeña polla arrugada por la edad, y hasta hicieron un 69, ella estaba empeñada en hacer que su abuelo disfrutase y desde luego que lo consiguió.